CINCO MINUTOS CON PANCHO VILLA
Imaginemos por un instante que nos sentamos frente al espejo retrovisor, y en esa introspección de la historia, se nos presenta la oportunidad de estar frente a frente por 5 minutos, ante ese personaje de la revolución mexicana, que es mito, leyenda y realidad. ¿Qué preguntas le formularía usted? Sería muy interesante, ¿no lo cree? Sobre todo, resultaría muy fascinante conocer la opinión de Pancho Villa, de todo lo que se realiza en su honor en la actualidad, para conmemorar, cosa curiosa su muerte y no así su vida. Por eso permítame tomar esa posición de entrevistador y desarrollar algunas interrogantes que cosquillean en mi curiosidad.
La primer pregunta sería: Sr. Villa, usted dijo alguna vez, “Parral me gusta hasta pa’ morir”, ¿sigue pensando lo mismo? Es decir, quizá el sentido de su frase tenía otras expectativas, por ejemplo, morir de causas naturales una vez que la madurez llegara a su vida, quizás la forma en la que fue emboscado y asesinado no era el escenario que usted soñó para morir. Sin embargo, gracias a eso hoy el pueblo de Parral, aparece en el mapa de la historia y sus pobladores seguimos explotando, “turísticamente” un hecho tan lamentable, como es el asesinato de una persona como usted. Hoy organizamos múltiples actividades para conmemorar su aniversario luctuoso; eventos culturales, deportivos, sociales, simulacros, concentraciones motociclistas, grandes cabalgatas y una serie de eventos más, que atraen la atención de propios y extraños, por eso la segunda pregunta sería, ¿se imaginó usted que, a casi un siglo de su muerte, seguiría beneficiando económicamente al pueblo que lo vio morir? A un pueblo que consumió la beta de plata de la mina La Negrita y hoy se regocija, por haber encontrado la beta turística de Pancho Villa.
La historia no ha sido transcrita por ninguna persona que haga las veces de secretario y vaya plasmando fidedignamente en un papel, cada uno de los acontecimientos en el momento que se presentan, por consiguiente, la historia es un cúmulo de informaciones, que se han escrito con base en las interpretaciones muy personales de muchos individuos, lo cual no garantiza que ésta sea totalmente cierta; en este sentido, la tercer pregunta sería; ¿considera que la historia ha sido justa? ¿Tiene usted en ella el lugar que se merece?
Son muchas las anécdotas, leyendas, mitos, realidades, que se enuncian de su persona, del revolucionario, del gobernante, del asesino, del invasor, del mujeriego, del astuto y valiente Pancho Villa, pero tal vez, los mexicanos y el mundo en general, no somos congruentes con su legado.
Según las versiones más consistentes, usted se convirtió en asesino y luego en bandolero, por defender el honor de su familia. Cuando el patrón intentaba abusar de su hermana, usted a su corta edad simplemente lo asesinó, acontecimiento que según las circunstancias se pudiera entender y que a la postre le dio el motivo para dejar de ser Doroteo Arango y transformarse en Pancho Villa. Sin embargo, al paso del tiempo usted mismo fue un seductor de mujeres, acumulando una larga lista, jamás fue capaz de establecer una relación duradera con una sola mujer y se jactó de tener mujeres por todos lados, aquí la cuarta pregunta sería, ¿Por qué actuó de forma similar al agresor de su hermana? ¿Fue un trauma que nunca superó?
Ser un promotor de la educación, es uno de los aspectos positivos que la historia le reconoce, su interés para que la niñez tuviera escuelas y maestros hablaba muy bien de usted, tal vez en el fondo hubiera deseado usted mismo tener esas oportunidades, si así hubiese ocurrido, la quinta pregunta sería, ¿Cuál habría sido el destino de Doroteo Arango?
Los 5 minutos se acaban; una sexta y última pregunta, ¿Por qué se negó a ser presidente de México? En verdad fue por un acto de humildad, al reconocerse como una persona que no estaba preparada para gobernar un país o simplemente le dio miedo y prefirió seguir sus propias reglas del juego.
Como no existe el hubiera y no es posible regresar el tiempo, entonces tomemos estas preguntas como una alucinación y formulemos en nuestro propio criterio, las posibles respuestas que Pancho Villa daría.
Por: Ing. Leoncio Durán Garibay, Regidor de Educación y Cultura del H. Ayuntamiento de Hidalgo del Parral.